El único lugar para los genocidas, es la cárcel

Por Gustavo Brufman* | Estallaron el lunes 30 las cárceles de la provincia. Los motines en Coronda, Las flores y los reclamos en Piñero, reclamaban condiciones frente al coronavirus y la pandemia del Covid19. Sin embargo, los únicos presos que obtienen beneficios son los genocidas, los que formaron parte del plan sistemático del Terrorismo de Estado contra el pueblo argentino y su clase trabajadora, que azotó nuestro país en la última dictadura cívico-militar-empresarial.

Foto: Jerónimo Principiano

Tal el caso de Walter Pagano, condenado a cadena perpetua en la causa Guerrieri (I, II y III) por delitos de lesa humanidad (privaciones ilegítimas de la libertad, torturas, robo de bebés, homicidios, desapariciones) y uno de los más emblemáticos asesinos condenados en mayo de 2017, que operaban como personal civil de inteligencia (PCI). Este viernes obtuvo prisión domiciliaria bajo el argumento de su defensa de ser “grupo de riesgo” frente a la pandemia.

Paradojas de nuestra lucha contra la impunidad. La lucha que nunca cesa. El asesino torturador que transitó los años de la democracia reciclado en bandas amparado por estructuras del estado y apretando sistemáticamente durante años a compañeros y compañeras militantes de organismos de derechos humanos, y de nuestra CTA y otras organizaciones populares, principal sospechoso de atentados perpretados en nuestra ciudad de Rosario (https://www.pagina12.com.ar/1998/98-10/98-10-09/rota3a.htm) obtiene hoy el beneficio por ser “grupo de riesgo” mientras estallan los motines por drama de los detenidos.

Desde la CTA A seguimos exigiendo cárcel perpetua, común y efectiva para todos los asesinos del proceso

No olvidamos, no perdonamos

Juicio y Castigo

Memoria, Verdad y Justicia

*Gustavo Brufman, Secretario de Formación CTAA Rosario

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