El ajuste en marcha: pronunciamiento de la CTAA Rosario

Por CTAA Rosario* | La Central de Trabajadorxs de la Argentina Autónoma Regional Rosario plantea su posición ante la coyuntura nacional, provincial y local.


“Yo creo que el sueldo digno es aquel que estemos en condiciones de pagar y de sostener”.

–  Claudio Moroni, Ministro de Trabajo de la Nación –


Desde la CTAA Autónoma Rosario elegimos esta declaración del funcionario nacional para iniciar este pronunciamiento en torno a la coyuntura. La frase de Moroni, sintetiza parte de la postura a la que nos confrontamos les estatales y la clase trabajadora en su conjunto. Si quien debe ‘mediar’ (Ministerio de Trabajo) considerando que entre patrones y trabajadores hay una relación desigual, toma el discurso del patrón, no hay balanza: hay pisotón.

La fuerza de trabajo en comparación interanual del segundo trimestre del año, sufrió un golpe durísimo: hay 3,4 millones de ocupados menos, la gran mayoría en puestos precarizados. El empleo registrado ‘resistió mejor’, pero las horas trabajadas cayeron más de un 40%. Además, en agosto el salario real siguió ‘derritiéndose’: en lo que va de la pandemia los asalariados registrados del sector privado perdieron un 6,6% mientras que en el sector público la caída fue del 5,8%. Desde los máximos de octubre de 2017 los retrocesos fueron 18,5% y 23,5%, informó el Observatorio de Derecho Social de la CTAA.

Las paritarias nacionales con un 7% de ofrecimiento y las provinciales con 0% de aumento salarial (sólo se pactó tarde una miseria acumulada de sumas en negro) son parte de una política extendida que es preocupante. Lo sería en cualquier escenario, pero más en medio de una pandemia que puso a les estatales (áreas salud, educación, entre muchas otras) como esenciales.

En el caso de Santa Fe, la indetenible afrenta conservadora de Omar Perotti inició el año retrasando el pago de salarios. Luego, congeló las paritarias. Y después de meses de pandemia y sometimiento de les trabajadores a dinámicas insalubres e indignas, sin aumento salarial, propuso sumas en negro que desfinancia la obra social y la caja de jubilaciones. Les municipales de Rosario, sí pudieron discutir sumas remunerativas. La perspectiva debe ser que en diciembre los aumentos pasen a ser remunerativos en el Estado.

Perotti tiene plata en la provincia y no atiende emergencia sanitaria ni educativa. Hay un abandono de sectores vulnerabilizados, como les jubilados y reemplazantes de diversas áreas, siendo que es necesaria y urgente la creación de cargos para esos reemplazos, para menguar el agotamiento de esenciales y cubrir bajas y licencias. Quedará en nuestras manos empujar las creaciones de cargos necesarias.

No habrá otro mecanismo para lograrlo más que continuar la lucha. Un gobierno provincial que puso a su propio Ministro de Trabajo, junto con legisladores de otras fuerzas políticas, a militar la adhesión lograda a la nefasta, regresiva e inconstitucional Ley de ART del macrismo,  definitivamente interés en la salud, no tiene.

El Estado, en expresión programática de los diversos gobiernos, decidió descargar el ajuste en les trabajadores y los sectores populares, para cumplir con los compromisos externos. El anuncio de medidas ortodoxas en el área económica a nivel nacional, no puede despegarse del diálogo con el Fondo Monetario Internacional. Mientras, ‘para atrás y en chancletas’ van las promesas electorales de proteger a les jubilados, la intención de intervenir en Vicentin, el aporte de las grandes fortunas y la muestra de potencialidad represiva desplegada en Guernica marcó un hito oscuro.

Todo esto ha significado también una sobrecarga sobre las mujeres y cuerpos feminizados, aumentando su precariedad laboral, su vulnerabilidad ante las violencias, incrementando sus tareas de cuidado y sometiéndolas a extenuantes jornadas de trabajo rentadas y no rentadas en el hogar e incluso en las organizaciones que proveen asistencia.

Les esenciales hoy somos tratados como desechables. Quienes nos desempeñamos en el Estado y en el sector privado, con o sin pandemia, somos las personas que permitimos que la vida siga funcionando, que las personas accedan a sus derechos, y cubran sus necesidades de cuidado. Por eso, el 10 de noviembre vamos a una jornada de lucha en educación y salud. Subrayamos: la salud y la educación son derechos inalienables.

Para finalizar vale la pena recordarle al Ministro Moroni que el Artículo 14 bis de la Constitución Nacional, a su pesar,  garantiza el salario mínimo vital y móvil como la menor remuneración que asegure alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión (Art.116 LCT). Según ATE Indec, esa suma en septiembre de 2020 se ubica en $73.470.

A su vez, es justo mencionar que la primera vez que se estableció el derecho al Salario Mínimo, Vital y Móvil, fue mediante el Decreto 33302/45, conjuntamente con el aguinaldo y un aumento general de los salarios. Lo anunció quien le da nombre al movimiento gobernante en Nación y Provincia: Juan Domingo Perón. Por lo visto, esas políticas progresivas del discursivamente ponderado primer peronismo, quedaron junto a la frase de Eva Duarte “donde hay una necesidad, nace un derecho”, sepultadas con las casillas de Guernica.

De nosotres, de nuestra lucha lucha y unidad dependerá otra vez, evitar que nos arrebaten conquistas históricas y avanzar en las que nos faltan. Como decía Agustín Tosco, de cuyo fallecimiento se cumplió un nuevo aniversario este 5 de noviembre:

“Nuestra experiencia nos ha enseñado que,
sobre todas las cosas, debemos ser pacientes,
perseverantes y decididos.
A veces pasan meses sin que nada
aparentemente suceda.
Pero si se trabaja con ejercicio de estas
tres cualidades, la tarea siempre ha de fructificar;
en una semana, en un mes o en un año.
Nada debe desalentarnos.
Nada debe dividirnos.
Nada debe desesperarnos”.

CTA Autónoma Regional Rosario

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