En el marco del cese de actividades por la balacera que hirió a un niño de primer grado de la escuela 1319, la CTAA Rosario concentró en unidad con otros sindicatos en el Ministerio de Educación. Se planteó la posibilidad de un paro regional para la semana entrante contra la violencia que azota a la ciudad.
Dolor y bronca. Con esas sensaciones transmutadas en organización de la lucha, gremios locales se concentraron en la cartera para exigir a las autoridades que den “respuestas urgentes y profundas en defensa de toda la comunidad educativa, de la escuela pública y de la vida”, ante una nueva balacera en una puerta escolar donde un niño fue herido.
“Van por las escuelas porque son las que cobijan, las trincheras donde los pibes y pibas encuentran una alternativa de vida. Hay muchas responsabilidades. La del Estado es saber con qué balas se sale a matar. Cada bala tiene su número y no se investiga eso. El narcotráfico está más organizado que la respuesta estatal a las necesidades de la gente. Hay que investigar profundamente de dónde salen las balas que hieren a nuestra ciudad”, dijo.
Y recordó: “en 2001 asesinaron a un compañero nuestro en el techo de la escuela donde trabajaba por pedir que dejen de tirar que hay pibes comiendo. Es lo mismo que hoy seguimos diciendo en las puertas: ¡paren de tirar que hay pibes estudiando!”. Posterior al acto, referentes sindicales ingresaron al Ministerio a exigir respuestas. Además, se planteó la necesidad de construir un paro regional en unidad contra la violencia que podría realizarse la semana entrante.
Comunicación CTAA Rosario