Organizaciones sociales y sindicales marcharon este martes y realizaron 60 ollas populares frente a Sede de Gobernación. Además, hubo concentración y asamblea en Plaza San Martín. Partieron de diferentes puntos de la ciudad denunciando que “el hambre es un crimen”.
Desde temprano, las y los trabajadores de los territorios concentraron en diversos lugares y se movilizaron a la Plaza San Martín. La Federación Nacional Territorial de la CTAA Rosario, concentró en Desarrollo Social (27 de Febrero y Alvear) y marchó hasta el punto de encuentro con el bloque sindical, en Oroño y Córdoba.
La realidad de las barriadas es acuciante: con ajuste en las partidas oficiales, crecimiento de comensales –muchos, afirman, son personas jubiladas totalmente desprotegidas- retirada del Estado en la garantía de derechos esenciales pero presencia represiva, y avance de las economías delictivas que llegan para responder a ese vacío sometiendo a las y los vecinos a sus lógicas.
En la asamblea realizada frente a la sede local de Gobernación, tomaron la palabra las compañeras que cocinan en las distintas ollas de los barrios y coincidían en que cada día se suman más personas y que todos los días deben decirles a familias enteras que no hay más raciones. Desesperación a flor de piel.
Maximiliano Molina, referente de FENAT local, que sostiene 5 merenderos y 10 comedores comunitarios, contó: “tuvimos que bajar la ración de dos veces a la semana -que es con lo que arrancamos con este gobierno- a una vez por semana. Nos desfinanciaron, no llegamos a cubrir ni la mitad de la semana con la cuota de alimenticia. Estamos e solidaridad con otras organizaciones sociales hermanas que pasamos por las mismas necesidades y creemos que la única forma de revertir esto es en unidad, con organización y pensar que se puede llegar a dar lo que necesitamos, que de fondo es trabajo”.


Consultado por la política gubernamental, apuntó: “es un gobierno que está vendiendo la patria, que está recortando los lugares más vulnerables de nuestra sociedad y cada vez estamos peor pero nunca aflojándole a la lucha y al compañerismo que nace en las calles y se transmite en nuestro barrio”.
En sintonía, Jésica de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) de Rosario, que pertenece al comedor Un Nuevo Sol para los Chicos, de Barrio Alvear, que atiende a 150 personas, resaltó que actualmente hay 1.300 comedores en Rosario sin ayuda. “Cada vez son más gente la que se suma a los comedores. Lo que nosotros estamos pidiendo es trabajo. No sabemos qué hace Milei con el ajuste que nos está haciendo al pueblo. ¿Dónde va esa plata?”, interrogó.
Eleonora Salvatierra, Secretaria de Salud y Seguridad Laboral de ATE Rosario, recordó que estos trabajadores y trabajadoras populares “son invisibles” y no cuentan con derechos elementales. “Estamos todos juntos en unidad. Y luchando contra este Gobierno Nacional y este Gobierno Provincial”.
Edgardo Arrieta, de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte enfatizó en que “las compañeras que dan lo más preciado de su vida, que es su tiempo, se rompen el alma para tratar de cocinar y llegar a darle a toda la gente de comer. Parece que no se visibiliza, por eso le agradezco que estén acá, porque no trascienden, no se ve y las necesidades son cada vez mayores. Y, como sindicato, tenemos que acompañar, justamente, a todos los compañeros que están pasando por esto, todos los movimientos sociales, vamos estar en la calle. Porque no es momento para dirigentes detrás de lo del escritorio, tenemos que estar acá, en la calle, unificado, esto no es electoral, esto es una necesidad”.
Gustavo Teres, Secretario Adjunto de la Central de Trabajadorxs de la Argentina Autónoma Regional Rosario, denunció: “Sabemos que en los sectores populares, en nuestras infancias, en nuestras niñeces, el hambre se vive. Y me parece que estamos viviendo situaciones agobiantes y de angustia que deben ser reparadas inmediatamente”.
Acerca de la situación puntual en la provincia de Santa Fe, subrayó que es la provincia que más bajo salarios tiene en la administración pública. “La provincia más rica del país está entre las seis que más bajo nivel de poder adquisitivo tiene de parte de los empleados públicos”. Y concluyó: “la deuda es con el pueblo, y no con el Fondo monetario, que la deuda externa en este momento tiene que esperar, que hay que dejar de pedir estos préstamos leoninos, que claramente después los tiene que pagar el pueblo. Y hay que empezar a mirar hacia los sectores más postergados para revertir esta situación de emergencia”.
Comunicación CTAA Rosario – Fotos: Prensa ATE Rosario.