En una jornada cargada de descontento por las incesantes provocaciones del gobierno provincial, estatales, docentes públicos y privados y profesionales de la salud, coparon la Plaza San Martín. Se despliega un paro contundente en todos los sectores que continuará las próximas dos semanas.
“No vamos a aguantar que este gobierno se nos ría en la cara”. Con esa frase, la Secretaria General de ATE y CTAA Rosario, Lorena Almirón, expresó la enorme bronca que hoy se manifestó frente a la sede rosarina de Gobernación. “Buscamos que el gobierno cambie de actitud, abra la caja y no postergue la paritaria. El Gobernador Perotti es el responsable del conflicto”, dijo el Secretario General de Amsafe Rosario, Juan Pablo Casiello. “Los bolsillos no esperan más, la inflación está licuando nuestros salarios”, advirtió el dirigente de SIPRUS, Jerónino Ainsuaín.
La Asociación Trabajadorxs del Estado y el Sindicato de Profesionales de la Salud desarrollaron este jueves y viernes un paro de 48 horas. La docencia pública y privada definió un paro de 24 horas y dos de 72 días para las semanas que vienen. Los reclamos son comunes: reapertura de paritarias, aumento salarial de emergencia trasladable a jubilaciones, cláusula de revisión automática, pase a planta y condiciones de trabajo.
Ante las definiciones gremiales, no obstante, el gobierno provincial puso fecha de reunión para septiembre y amenazó con descontar los días de huelga. En la plaza, de a miles se les respondió con contundente repudio. “En ese edificio –por la sede oficial- están los que gobiernan, pero el Estado está en esta plaza”, dijo el referente de SADOP, Martín Lucero.
No se aguanta más
Almirón contó que al día de hoy el 80% de las personas que sostienen el estado provincial están bajo la línea de pobreza. “Y ni hablar si queremos llegar a la canasta familiar: estamos a un tercio, los números de ATE INDEC fueron realmente lapidarios, son 180 mil pesos para llegar a esa canasta”, denunció.
“Hoy con lo que ganamos, los estatales tenemos que decidir si alquilamos, si pagamos el alquiler, si comemos o si nos vestimos, porque las tres cosas juntas no lo podemos hacer. No alcanza con adelantar cuotas”, sentenció la referente rosarina que ubicó la pérdida salarial del sector en el orden del 40% en el último lustro.
Por parte de la docencia pública, Casiello destacó que “ayer una votación masiva de la docencia que definimos sumarnos al paro, nosotros por supuesto en la calle. Buscamos que el gobierno cambie de actitud, abra la caja y no postergue la paritaria. El Gobernador Perotti es el responsable del conflicto”. Sobre la amenaza de descuentos consideró que “es la apuesta a profundizar el conflicto, busca echar nafta al fuego. Es el gobierno el que está incumpliendo la ley”.
El referente de lxs profesionales de la salud apuntó: “el Gobierno y el Ministro de Trabajo Pussineri, sale a decir que tenemos que colaborar. Yo lo primero que le diría es que vaya a colaborar a la guardia del Hospital Provincial del Centenario, que vaya a colaborar con los compañeros de los Centros de Salud que atienden a todas las víctimas provenientes de la pandemia, del narcotráfico, de los incendios en el humedal, de una ciudad aturdida por el humo y por las balas en cada barrio. Yo le diría a Pussineri que vaya a colaborar ahí, que vaya a colaborar con los trabajadores sociales del Hospital y a decirle a la gente que no tiene las herramientas para resolverle los problemas”.
Expresando fuertemente que plata hay y que uno de cada cuatro dólares que se generan en la Argentina salen de la provincia más superavitaria del país, que es Santa Fe, lxs referentes de los cuatro sindicatos manifestaron la necesidad de seguir en las calles.
“Tenemos que luchar por un salario digno y para que las condiciones de nuestro trabajo sean cada vez mejores, que en los comedores escolares tengamos un mayor presupuesto para que los pibes y las pibas no se mueran en las escuelas porque tienen hambre o se mueren de desnutrición. Es también nuestra responsabilidad que eso no pase. Sigue siendo un crimen que cualquier pibe o piba se muera de hambre en esta provincia y este país rico, y quienes estamos en esta plaza no vamos a ser cómplices”, cerró Almirón.
Con paros de 72 horas en puerta, las semanas venideras se avizoran a pura lucha ante un gobierno que no sólo no escucha los reclamos, sino que se muestra totalmente insensible a las diversas exigencias de quienes cada día sostienen lo público en la provincia.
Comunicación CTAA Rosario