Por Sofía Alberti* | El agua no detuvo la necesidad de encontrarse para ratificar el compromiso con la memoria, la verdad y la justicia. Algunes partieron de unos puntos, otres concentraron directamente en el Monumento.
Se leyó allí un documento de los organismos de derechos humanos bajo una lluvia que no cesaba. Mientras, la Plaza 25 de Mayo estaba rodeada de pañuelos blancos con nombres de desaparecidos y desaparecidas que flameaban bajo la lluvia. En el medio, como un ritual entrañable que es el compromiso desde la cultura con la lucha social, Arte x la Libertad pintaba un mural en el Pasaje Juramento. Pero esta vez además de hormigas y pañuelos, estaba enorme la figura de Juan Emilio Basso, integrante de HIJOS recientemente fallecido. Y el dolor de esa pérdida también se hizo colores.
Fue otro 24 de marzo en pandemia, pero movilizados y movilizadas. Recordando a los y las desaparecidas en democracia también, junto con lxs 30 mil. Exigiendo justicia por todos esos crímenes y también por aquellos del gatillo fácil y desaparición, que son ni más ni menos que el resabio del método e ideología dictatorial en las fuerzas de (in) seguridad en democracia.
Bajo agua, con los trapos, con las lágrimas y las sonrisas, ahí estuvimos una vez más por las Madres, las Abuelas, por quienes no están, por quienes falta saber dónde están, por lxs nietxs que nos falta recuperar. Ahí estuvimos, 45 años después nuevamente en la plaza gritando MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA, CÁRCEL COMÚN PERPETUA Y EFECTIVA A LOS RESPONSABLES MILITARES Y CIVILES DEL GENOCIDIO.
Nota y fotos: Sofía Alberti, Secretaria de Comunicación CTAA Rosario
Pronunciamiento completo de la CTAA Rosario a 45 años del golpe AQUI